A eso de las 8 de la noche del domingo 6 de octubre, trascendió la noticia sobre el fallecimiento del adolescente Henry Franco Puac Aguilar de 15 años de edad, quien tras pasar 18 días hospitalizado en el área de intensivo, murió a causa de un paro cardiorrespiratorio.
El director del hospital Regional de Occidente, doctor Juan Alegría, detalló que su hora de deceso fue reportada a las 17:20 horas.
El joven recibió un disparo en la cabeza, mientras participaba de una actividad escolar en un Instituto Básico por Cooperativa ubicado en el municipio de Colomba, Costa Cuca en el departamento de Quetzaltenango.
La escena era dantesca, luego que el adolescente herido quedara tendido sobre su escritorio, con el rostro bañado en sangre ante la mirada aterrorizada de decenas de estudiantes y maestros del lugar. Pese a todo, Henry no murió en el lugar, fue llevado con vida, pero en estado crítico hacía la emergencia del referido hospital, donde permaneció casi tres semanas.
Su familia en medio del dolor y la desesperanza veía con fe la recuperación de Henry, aunque informes médicos no eran alentadores y en caso de sobrevivir, enfrentaría secuelas irreversibles.
Sus seres queridos se preparan para darle el último adiós en un cementerio de la localidad, mientras su presunto homicida, otro adolescente de 14 años de edad se encuentra en una correccional.
De acuerdo con investigaciones preliminares, el joven atacó mortalmente al otro debido a una partida de juego llamado “Free Fire”. Otras hipótesis relacionan el crimen con pandillas, ya que al parecer el joven asesinado se habría negado a integrar una estructura criminal, lo que terminó costándole la vida.
Autoridades continúan investigando el caso, para establecer y determinar las causas que originaron esta tragedia.