Luego de 14 meses de dolor e incertidumbre, finalmente este 16 de julio se confirma que el cadáver localizado el pasado 6 de junio en el municipio de San Vicente Pacaya, en el departamento de Escuintla, pertenece a la ciudadana estadounidense de origen hondureño, Floridalma Roque.
Como si se tratara de una fecha macabra, la víctima fue vista por última vez el martes 13 de junio de 2024, cuando se sometió una cirugía estética en la clínica del médico Kevin Malouf, ubicada en un edificio de oficinas en la exclusiva zona 14 capitalina y nunca más volvió a ser vista.
Desde entonces comenzó el calvario para su familia, que incansablemente ha luchado contra viento y marea para dar con el paradero de Roque.
Según los familiares de Floridalma el informe de ADN practicado por Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) a los restos encontrados en Escuintla pertenecen a Floridalma Roque. Sin embargo, el ente forense resalta que no ha emitido tal confirmación, debido a que el caso se encuentra judicializado, y únicamente el Ministerio Público (MP) esta facultado para dar oficialmente esta información.
Macabro hallazgo
Familiares de Floridalma Roque han dado a conocer que el informe forense cuenta con una serie de fotografías en las cuales se confirma la versión que dio el enfermero de la clínica, Luis Castro, quien detalló que el cuerpo fue mutilado por el doctor Malouf.
Buscan sentar un precedente
José y Jorge López Roque, ambos hijos de Floridalma Roque, asistieron la mañana de este martes al Congreso de la República, en donde presentaron una iniciativa de ley que busca crear un registro, en el que todos aquellos técnicos y profesionales que trabajan con el cuerpo humanos, formen parte de un listado, el cual pueda ser consultado a través de una página web dirigida por el Ministerio de Salud Pública.
Esto permitirá a pacientes o interesados, comprobar que los médicos y técnicos cuenten con requisitos necesarios para ejercer su labor, sin poner en riesgo sus vidas.
