Kamala Harris y Donald Trump invitaron este sábado a varias celebridades a su reñido duelo electoral por la presidencia de Estados Unidos, que incluyeron nuevos ataques mutuos e invitaciones al voto anticipado en los estados disputados a pocos días de los comicios del 5 de noviembre.
America is ready to chart a new way forward.
America is ready for a new and optimistic generation of leadership.
That's why Democrats, Republicans, and Independents are supporting our campaign. We know we need a president who works for all Americans. pic.twitter.com/402ob8eMg7
— Kamala Harris (@KamalaHarris) October 20, 2024
El expresidente republicano, que aspira a retomar la Casa Blanca, respondió a esas acusaciones con un discurso maratoniano en Pensilvania, mientras el multimillonario Elon Musk hacía campaña a su favor en otros lugares del estado.
After years of building up foreign countries, we are finally going to build up our Country, defend our borders, and protect our cities. We will not be invaded. We will not be occupied. We will not be conquered. We will be a free and proud nation once again! pic.twitter.com/LqWWxBdhET
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 20, 2024
Ambos aspirantes están luchando en todos los frentes para conseguir el apoyo de los votados en una carrera que, según los sondeos, está prácticamente empatada a menos de tres semanas de los comicios.
“Defendemos la idea de que la verdadera medida de la fuerza de un líder no se basa en a quién derriba, sino en a quién levanta”, dijo Harris en Detroit (Míchigan), al insistir en su promesa de invertir en las clases media y trabajador.
Más tarde, en Atlanta (Georgia), acusó a Trump, de 78 años, de “elidir debates y cancelar entrevistas”.
“Cuando responde a una pregunta o habla en un mitin, ¿se han dado cuenta de que tiende a salirse del guion ya divagar, y en general, no puede terminar una idea?”, indicó.
Trump, por su parte, comenzó su acto de más de 90 minutos en Pensilvania con un largo monólogo sobre el golfista Arnold Palmer, que da nombre al aeropuerto regional de la ciudad de Latrobe, donde se comparó.
A continuación, se lanzó a su rutinario y serpenteante discurso que incluye ataques a los migrantes, denigraciones personales a Harris y la repetición de afirmaciones erróneas y sin pruebas sobre las elecciones de 2020.
El magnate trató de atraer a los votantes de clase trabajadora haciendo subir al escenario a un desfile de trabajadores del acero.
También subrayó la importancia de los delegados electorales de ese estado del noreste del país: “Si ganamos Pensilvania, ganamos todo el maldito asunto”.
Votación anticipada en marcha
Los dos candidatos están, por lo demás, pasando sus últimos días de campaña en estados donde la votación anticipada ya está en marcha.
Harris ha visto señales de que su presión para que los demócratas voten lo antes posible está surtiendo efecto.
Hasta el viernes por la noche se habían emitido casi 12 millones de votos, alrededor de un tercio de ellos en los siete estados pendulares que se esperan decidan las elecciones, según datos recogidos por el Laboratorio Electoral de la Universidad de Florida.
Georgia ha batido récords, mientras que Carolina del Norte informó que el jueves pasado, primer día de la votación anticipada, habían sufragado más electores que en 2020, año en que se había registrado un sustancial del voto por correspondencia debido a la pandemia.