Lo que inició como una tradición religiosa, se convirtió en tragedia.
Durante la tarde de este domingo, un grupo de personas, miembros de una congregación evangélica, realizaban los tradicionales bautizos en la playa pública del Lago de Atitlán, en San Lucas Tolimán, Sololá.
Sin embargo, no contaban con la profundidad que se registra en ese sector del lago.
Eran seis personas quienes realizaban un bautizo en las orillas del lago y decidieron adentrarse al agua. En medio del rito del bautizo, los participantes empezaron a hundirse y de forma desesperada, intentaban nadar.
Ante la mirada de decenas de asistentes y en medio de la emergencia, algunos que estaban cerca intentaron ayudarlos, y dieron aviso a los Bomberos Voluntarios.
Cinco hombres fueron rescatados, pero uno, murió ahogado. Fue identificado como Miguel Tzot Mejía de 45 años.
Los afectados pertenecían a una iglesia cristiana del municipio de Chichicastenango, Quiché.