Varios incendios avanzan sin control en Los Ángeles, California, alentados por fuertes vientos que mantienen desde ayer en estado de emergencia dicho estado, con alrededor de 30 mil personas evacuadas, ante la amenaza de que las llamas se sigan propagando rápidamente por zonas de viviendas.
El incendio en Pacific Palisades, uno de los barrios más acaudalados de la ciudad, pasó en pocas horas de afectar a 80 hectáreas a hacerlo sobre 1.500. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, declaró por la tarde el estado de emergencia.
Hundreds of @LAFD firefighters have been fighting fires through the night.
Thank you to all the crews working tirelessly to respond and protect life and property.
— Mayor Karen Bass (@MayorOfLA) January 8, 2025
Pese a la movilización de los bomberos para luchar contra el fuego, el desastre no ha podido ser contenido, según información del departamento de bomberos de Los Ángeles (LAFD). El rápido avance de las llamas amenaza a unas 10 mil viviendas.
Se prevé que los vientos con ráfagas de más de 90 km/h persistan hasta el jueves, lo que podría intensificar la propagación del fuego, debido al paisaje reseco de la ciudad que ha sufrido una ausencia considerable de lluvias en la temporada. Las precipitaciones en el sur de California apenas han alcanzado los 2,5 mm de lluvia desde principios de mayo. Todo ello ha contribuido a un aumento de las temperaturas medias durante la primera semana de enero.
El colapso climático causado por la quema de combustibles fósiles está intensificando los fenómenos meteorológicos extremos. Cuando se hagan los pertinentes estudios de atribución, este incendio forestal podría contarse entre ellos. No es, ni mucho menos, la primera vez que California sufre este tipo de calamidades.
La destrucción del fuego ha sido consustancial a este estado en los últimos años. El fenómeno de los mega incendios ha crecido tanto en todo el mundo que hasta se ha acuñado un nuevo término para designar esta época: piroceno.