Las principales empresas de tecnología en Estados Unidos como Silicon Valley, confirmaron que los controles para empleados originarios de China se implementan para evitar el “robo” de propiedad intelectual por parte del gigante asiático. Entre los colaboradores que son controlados, se incluye a personas que tengan familiares u otro tipo de relación con personas provenientes, especialmente de Beijing.
Uno de los hechos que más ha llamado la atención es que un estudiante de posgrado en ciencias de la computación, solicitante de asilo político en Estados Unidos, estará en el equipo de monitoreo y prevención de ciberataques chinos.
Esta no es la primera vez que se realizan este tipo de medidas, recientemente se aseguró que Estados Unidos impondría sanciones a varias empresas chinas por supuesto robo de información y por sus ventas de armas a Taiwán. Estas han sido catalogadas como sanciones ilegales y unilaterales.

Otras empresas que buscan su ciberseguridad
Según un estudio publicado por Germán Patiño, la ciberseguridad se ha convertido en una prioridad estatal a partir de la década del siglo XXI. En un mundo digital, la información es la esencia del valor, proteger esa información es, por lo tanto, primordial.
Google, OpenAI y Sequoia Capital también se han sumado a los esfuerzos para intensificar los contrales de seguridad de los empleados y posibles reclutas provenientes de China. Estas medidas en respuesta a las recomendaciones del gobierno de Estados Unidos sobre una creciente amenaza del espionaje chino desde el 2022.
Por otra parte, la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual nombró a China como la economía de ingresos medios con el ranking más alto del mundo.
Postura de Estados Unidos
Personeros del Departamento de Policías de Estados Unidos aseguraron que el gobierno chino ha tratado de robar la “propiedad intelectual, tecnología e investigación” de las industrias estadounidenses. Para hacer una llamada de atención, se ha impuesto sanciones económicas.
Durante el tiempo de restricción de la pandemia del COVID19, se tiene información que personas con familiares en China se vieron en situaciones comprometidas, ya que les solicitaban que hicieran cosas para el gobierno chino.
El portavoz de la embajada china, Liu Pengyu, se pronunció en medios estadounidenses indicando: “Nos oponemos firmemente a las acusaciones infundadas y difamaciones hacia China y esperamos que las partes relevantes puedan ver el desarrollo de China de manera objetiva y justa”.