Durante su participación en La Ronda de este lunes, el presidente de la República, Bernardo Arévalo, abordó una de las preocupaciones más sensibles para miles de familias guatemaltecas: el impuesto del 1 % aplicado a las remesas por parte del Congreso de Estados Unidos.
El mandatario expresó su respaldo a los guatemaltecos y guatemaltecas que residen en el extranjero, principalmente en territorio estadounidense, y reconoció el impacto directo que esta medida tiene en la economía familiar y nacional.
“Nos permite trabajar de otras formas para tratar de balancear el efecto que esto va a tener. Nosotros seguimos adelante trabajando en nuestro Plan Retorno al Hogar”, aseguró Arévalo.

Remesas bajo presión: un nuevo desafío económico
Las remesas constituyen una de las principales fuentes de ingreso para Guatemala, siendo fundamentales en la subsistencia de millones de personas. Según explicó el presidente, el impuesto originalmente propuesto era del 10 %, luego bajó al 5 % y actualmente se mantiene en 1 %, lo que sigue representando una carga económica significativa para los migrantes y sus familias.
Ante esta situación, Arévalo informó que su administración ha entablado diálogo directo con el Congreso estadounidense, con el objetivo de exponer las consecuencias de esta medida, no solo a nivel personal sino también económico.
“El impuesto afecta una de las causas estructurales de la migración: la falta de ingresos dignos”, enfatizó el gobernante.

El gobierno guatemalteco continúa desarrollando estrategias para contrarrestar los efectos negativos del impuesto, entre ellas, el fortalecimiento del Plan Retorno al Hogar, una iniciativa que coordina a distintas instituciones para brindar apoyo a los guatemaltecos que retornan al país.
Hasta el 3 de julio, se contabilizaban 22,123 personas retornadas, de las cuales 1,123 son menores de edad. En ese sentido, Arévalo subrayó la prioridad de garantizar que estos niños y adolescentes puedan regresar antes de cumplir la mayoría de edad, para evitar que sean tratados como adultos en los procesos migratorios.

Este plan, impulsado por el Ejecutivo, no solo busca facilitar el regreso de los migrantes, sino también apoyar su reintegración a la sociedad guatemalteca mediante servicios, oportunidades y condiciones más dignas.
Durante la reciente visita de la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, ambas naciones acordaron reforzar la cooperación en materia de migración infantil, asegurando un retorno seguro para los menores guatemaltecos.