En conferencia de prensa desde el Policlínico Gemelli de Roma, fue anunciada la salida del hospital del Papa Francisco.
Los médicos tratantes, Sergio Alfieri, director del Departamento de Ciencias Médicas y Quirúrgicas del Hospital Gemelli y director del equipo que siguió al Papa, y Luigi Carbone, subdirector y médico de referencia del Santo Padre, anunciaron que:
“La buena noticia que imagino que todo el mundo está esperando es que mañana el Santo Padre será dando de alta, mañana vuelve a Santa Marta”.
El Papa Francisco será dado de alta médica este domingo – Vatican News https://t.co/sw2ed6zeRJ
— Vatican News (@vaticannews_es) March 22, 2025
Los médicos del papa proporcionaron su primera actualización en persona sobre la condición del pontífice en un mes, una señal de que ha hecho un constante progreso en su lucha contra la doble neumonía.
La sesión informativa del sábado por la noche es la primera desde el 21 de febrero, una semana después de que el Francisco, de 88 años de edad, fuera llevado al hospital Gemelli tras experimentar varias crisis respiratorias que lo dejaron en estado crítico, aunque desde entonces se ha estabilizado.
A primeras horas de este sábado 22 de marzo, la Santa Sede por medio de sus redes sociales informaba que Francisco saludará e impartirá su bendición este domingo desde una ventana del hospital Gemelli de Roma, en su primera aparición pública desde su hospitalización.
Pope Francis intends to appear at his window tomorrow to greet the faithful and impart his blessing. pic.twitter.com/vu3K4SJbrY
— Vatican News (@VaticanNews) March 22, 2025
Propenso a neumonías
El líder de la iglesia católica es propenso a las infecciones pulmonares debido a que tuvo pleuresía cuando era joven y le extirparon parte de un pulmón.
El pontífice, de 88 años, ha estado hospitalizado en el Gemelli de Roma desde el 14 de febrero, cuando fue ingresado por problemas respiratorios, y posteriormente luchó contra una neumonía en ambos pulmones.
Inicialmente los médicos le diagnosticaron una infección compleja del tracto respiratorio de origen bacteriano, viral y fúngico y, poco después, neumonía en ambos pulmones. Los análisis de sangre mostraron signos de anemia, plaquetas bajas y el inicio de insuficiencia renal, todo lo cual se resolvió después de dos transfusiones de sangre.
Los cuadros más serios comenzaron el 28 de febrero, cuando Francisco experimentó un ataque agudo de tos e inhaló vómito, requiriendo el uso de una máscara de ventilación mecánica no invasiva para ayudarlo a respirar. Sufrió dos crisis respiratorias más en los días siguientes, lo que requirió que los médicos aspiraran manualmente el moco, momento en el cual comenzó a dormir con la máscara de ventilación por la noche para ayudar a sus pulmones a despejar la acumulación de fluidos.
Médicos y equipo de comunicación han indicado que Francisco en ningún momento perdió el conocimiento, que estaba alerta y cooperativo.
En las últimas dos semanas, se ha estabilizado y ha registrado ligeras mejoras, según ha informado la oficina de prensa del Vaticano.
Primera foto del Papa Francisco después de ser hospitalizado