La tos ferina es una infección respiratoria causada por una bacteria (Bordetella pertussis) muy contagiosa, que puede llegar a ser mortal, especialmente en recién nacidos.
Desde 2020, los casos sospechosos de tos ferina en Guatemala han variado cada año, y se registran pocos confirmados.
En este 2025, entre el 1 de enero y el 1 de marzo de 2025, se han registrado 14 casos sospechosos y 7 confirmados, principalmente en Pastores, Sacatepéquez y el área central.
Por su parte el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social no considera que la cifra es elevada, sin embargo emitió una alerta epidemiológica el 14 de febrero de 2025 para prevenir su expansión.
😷🤧 ¡No ignores la tos ferina!
Es contagiosa y puede ser peligrosa, especialmente en bebés.
Se transmite al toser o estornudar y provoca ataques de tos intensos.
💉 Protégete con la vacuna disponible en los centros de salud.
👶 Si tienes síntomas, consulta a un médico de… pic.twitter.com/JgipQfcTNp— Ministerio de Salud Pública (@MinSaludGuate) March 4, 2025
Síntomas
La infección ataca el revestimiento de las vías respiratorias. Las personas pueden contraer tosferina en cualquier época del año, pero generalmente las infecciones se observan a finales del verano y en otoño.
Los síntomas varían en función de la edad, las afecciones médicas y si el niño está vacunado contra la enfermedad. Uno de los principales signos es la tos fuerte. Entre cada ataque de tos, los niños respiran profunda y rápidamente. Esto puede crear el sonido agudo de “silbido”. La tos de la tosferina también se conoce como “tos de los 100 días” porque puede durar meses. A veces, la tos reaparece en infecciones respiratorias posteriores.
Una vez que te contagias con tos ferina, los signos y síntomas demoran unos 7 a 10 días en aparecer, aunque a veces puede ser más tiempo. Por lo general son leves al principio y se parecen a los del resfriado común:
- Moqueo
- Congestión nasal
- Ojos enrojecidos, llorosos
- Fiebre
- Tos
Luego de una semana o dos los signos y síntomas empeoran. La mucosidad espesa se acumula en las vías respiratorias y causa una tos incontrolable. Los ataques graves y prolongados de tos pueden:
- Provocar vómitos
- Volver el rostro enrojecido o azulado
- Causar fatiga extrema
- Terminar con un sonido silbante y chillón agudo al inhalar aire
No obstante, muchas personas no presentan el característico silbido. A veces, una tos seca persistente es el único signo de que un adolescente o adulto tiene tos ferina.
Complicaciones
Los adolescentes y adultos frecuentemente se recuperan de la tos ferina sin problemas. Cuando se presentan complicaciones, tienden a ser efectos secundarios de la tos agotadora, tales como:
- Costillas fisuradas o fracturadas
- Hernias abdominales
- Vasos sanguíneos rotos en la piel o en la parte blanca de los ojos
Bebés
En los bebés, especialmente los menores de 6 meses, las complicaciones de la tos ferina son más graves y pueden comprender:
- Neumonía
- Respiración lenta o interrumpida
- Deshidratación o adelgazamiento debido a las dificultades de alimentación
- Convulsiones
- Daño cerebral
Como los bebés y los niños de uno a dos años están en mayor riesgo de complicaciones de la tos ferina, es más probable que necesiten tratamiento en un hospital. Las complicaciones pueden poner en riesgo la vida de los bebés menores de 6 meses.
Prevención
La mejor forma de prevenir la tos ferina es mediante la vacuna DPT protege contra difteria, tos ferina y tétanos.
¿Cómo se le aplica la vacuna DPT?
La vacuna DPT se aplica mediante una inyección intramuscular en el brazo izquierdo que los médicos suministran junto con otras vacunas que actúan contra otras dos enfermedades graves: la difteria y el tétanos. Los médicos recomiendan comenzar la vacunación durante la infancia.